8M

Para marcar un contexto diré que me he criado en una familia muy respetuosa, feminista, donde siempre se me ha apoyado en todo y donde no se me ha hecho de menos por ser mujer.

Además, por mis circunstancias, mi carácter y mi forma de enfrentar las cosas, no me he sentido ofendida en exceso, no he sufrido acoso sexual más allá de algún amor de juventud obsesionado y jamás he sido maltratada.

Tras decir esto habrá quién diga: «Entonces, ¿Qué más quieres?»

Lo que quiero para mi y para TODAS las mujeres de mi entorno, de mi país y del mundo, de esta generación y de las futuras es que:

  1. Puedan criarse alrededor de gente como la que a mí me tocó.
  2. Nunca tengan que verse en situaciones machistas y de desigualdad.
Photo by Andrea Piacquadio on Pexels.com

Porque no haber sido nunca maltratada, haber crecido en una familia feminista y en un entorno social que casi lo era, no quiere decir que:

  • No haya cruzado un parque de noche corriendo o no haya rodeado por no pasar por ahí.
  • No se hayan burlado de mi cuando cogía el balón de futbol.
  • No haya preguntado a mis amigas (y ellas a mi) si ya habían llegado a casa.
  • No me hayan manoseado en un bar entre la confusión de la multitud.
  • No haya tenido que demostrar mis conocimientos pese a tener unos estudios y una carrera profesional que me avalan.
  • No haya dicho que no a planes fantásticos por no ir depilada.
  • No me haya sentido de menos por no llevar tacones.
  • No me haya hecho pasar por la novia de mi amigo para que ese tío me dejará tranquila.
  • No me hayan preguntado en una entrevista laboral si tengo pareja y si quiero tener hijos.
  • No me hayan gritado por la calle a pleno pulmón algún «piropo» poco apropiado (por no decir vergonzoso y despectivo).
  • No hayan cuchicheado sobre mí por haberme liado con ese o con el otro.
  • No hayan cuestionado mi orientación sexual por manejar un quad o un tractor.
  • No me hayan criticado por mi forma de vestir, por ser provocativa o poco femenina.
  • No hayan dado por hecho que ese coche no era mío (seguro que era de mi padre o de mi pareja).
  • No me hayan echado en cara mi responsabilidad de tener la casa limpia (en un piso compartido con otras tres personas, las tres chicos).
  • No haya cobrado menos que mi compañero por el mismo trabajo.

Y así podríamos seguir hasta aburrirnos (todas y cada una de estas situaciones son reales, vividas en primera persona).

Y para los que no creen en este día y en esta lucha y nos llaman exageradas, feminazis o cosas peores, les pregunto: si eres hombre, ¿Cuántas de estas situaciones de menosprecio has vivido sólo por ser hombre? Y si eres mujer, ¿No te reconoces en ninguna? ¿De verdad?

Claro está que la generalidad no representa al 100%, pero mientras haya una sola mujer a la que se le haga sentir de menos por el simple hecho de serlo, algo no estará bien.

Photo by cottonbro on Pexels.com

Porque que yo no haya sido maltratada, no quiere decir que este conforme con la situación actual.

Porque que hoy haya muchos hombres feministas, no es razón para dejar de denunciar las actitudes machistas.

Porque que nuestra sociedad sea cada vez más abierta, tolerante e igualitaria, no justifica que nos quedemos parados y callados por los que aún no lo son.

Así que si, quiero mucho más para mi y para todas las mujeres de hoy y de mañana. Quiero lo mismo que tú: vivir mi vida tranquila, segura y a mi manera.

Y por las que ya no están, las que están sufriendo, las que no pueden hablar… ¡¡¡Por todas ellas!!!

2 comentarios

  1. Gracias!! Lo has explicado tan sencillo como realmente lo es. Muy bien expresado y clarificador. De nuevo Gracias!!

    Me gusta

Los comentarios están cerrados.

A %d blogueros les gusta esto: