Para marcar un contexto diré que me he criado en una familia muy respetuosa, feminista, donde siempre se me ha apoyado en todo y donde no se me ha hecho de menos por ser mujer.
Además, por mis circunstancias, mi carácter y mi forma de enfrentar las cosas, no me he sentido ofendida en exceso, no he sufrido acoso sexual más allá de algún amor de juventud obsesionado y jamás he sido maltratada.
Tras decir esto habrá quién diga: «Entonces, ¿Qué más quieres?»
Lo que quiero para mi y para TODAS las mujeres de mi entorno, de mi país y del mundo, de esta generación y de las futuras es que:
- Puedan criarse alrededor de gente como la que a mí me tocó.
- Nunca tengan que verse en situaciones machistas y de desigualdad.

Porque no haber sido nunca maltratada, haber crecido en una familia feminista y en un entorno social que casi lo era, no quiere decir que:
- No haya cruzado un parque de noche corriendo o no haya rodeado por no pasar por ahí.
- No se hayan burlado de mi cuando cogía el balón de futbol.
- No haya preguntado a mis amigas (y ellas a mi) si ya habían llegado a casa.
- No me hayan manoseado en un bar entre la confusión de la multitud.
- No haya tenido que demostrar mis conocimientos pese a tener unos estudios y una carrera profesional que me avalan.
- No haya dicho que no a planes fantásticos por no ir depilada.
- No me haya sentido de menos por no llevar tacones.
- No me haya hecho pasar por la novia de mi amigo para que ese tío me dejará tranquila.
- No me hayan preguntado en una entrevista laboral si tengo pareja y si quiero tener hijos.
- No me hayan gritado por la calle a pleno pulmón algún «piropo» poco apropiado (por no decir vergonzoso y despectivo).
- No hayan cuchicheado sobre mí por haberme liado con ese o con el otro.
- No hayan cuestionado mi orientación sexual por manejar un quad o un tractor.
- No me hayan criticado por mi forma de vestir, por ser provocativa o poco femenina.
- No hayan dado por hecho que ese coche no era mío (seguro que era de mi padre o de mi pareja).
- No me hayan echado en cara mi responsabilidad de tener la casa limpia (en un piso compartido con otras tres personas, las tres chicos).
- No haya cobrado menos que mi compañero por el mismo trabajo.
Y así podríamos seguir hasta aburrirnos (todas y cada una de estas situaciones son reales, vividas en primera persona).
Y para los que no creen en este día y en esta lucha y nos llaman exageradas, feminazis o cosas peores, les pregunto: si eres hombre, ¿Cuántas de estas situaciones de menosprecio has vivido sólo por ser hombre? Y si eres mujer, ¿No te reconoces en ninguna? ¿De verdad?
Claro está que la generalidad no representa al 100%, pero mientras haya una sola mujer a la que se le haga sentir de menos por el simple hecho de serlo, algo no estará bien.

Gracias!! Lo has explicado tan sencillo como realmente lo es. Muy bien expresado y clarificador. De nuevo Gracias!!
Me gustaMe gusta
Se puede decir más alto pero no más claro. 👏👏👏
Me gustaLe gusta a 1 persona