Según la RAE:
- Odio: antipatía y aversión hacia algo o hacia alguien cuyo mal se desea.
- Amor: sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
Son dos palabras cuyo significado es muy extremo, ¿No os parece? Desear el mal… Necesidad de unión…
Sin embargo, hay personas que viven con la palabra Odio en la boca: «Odio la lluvia»; «Odio el amarillo»; «Odio a ese tío»; «Odio trabajar»; «Lo Odio»; «Odio… Odio… Odio…»
Y yo pregunto… Si eres capaz de Odiar tanto… ¿Amas a partes iguales? Para compensar tanto mal rollo, no sé, digo yo… Aunque no se oye usar el verbo Amar con la misma frecuencia. Nadie dice: «Amo el brócoli», por ejemplo.
Recuerda la definición: Necesitar la unión VS. Desear el mal. No se tu, pero en mi caso pocas cosas cumplen estas características. Creo que pocas personas realmente odia y aman a muchas personas/cosas. Me resulta bastante complicado.
Déjame pensar… Desear el mal… ¡¡Los mosquitos!! Que no es que les desee el mal, es que como los pille los mato (literalmente). Necesitar unión… ¡¡Mi perro!! Nos comunicamos con la mirada, conexión extrema, me necesita y lo necesito (sobretodo en las noches de invierno que me da calor). Y poco más, entre animales anda la cosa. Humanos: vosotros estáis ahí, en el montón, entre «me agradas» y «no me gustas un pelo» (así es la vida).

Así que, por favor, no seas odiador. Usemos bien el lenguaje y no pongamos más negatividad a la Vida, que a veces ya tiene bastante. Reconoce que no deseas mal, que como mucho no te gusta. Y si realmente odias tanto… Déjamelo claro porque, odiar no pero, pereza me vas a dar un rato.